“Espero que Rosario Central tenga un gran semestre”

Por Gonzalo Rossi.
Lo dice el ex volante del Canalla, Andrés Imperiale. Además, nos cuenta dónde empezó  a jugar, cómo llego al equipo rosarino y su paso por Bolivia y Europa, entre otros temas.
“Al ser un enfermo del futbol, veo todo lo que esté al alcance. Ni hablar de lo que sucede en Rosario Central, el cual soy hincha y es el tema de conversación a diario con mis amigos en las redes sociales. Espero que el Canalla tenga un gran semestre, por todo lo que se está haciendo en el club, desde lo deportivo hasta en la institucional, y logre el tan ansiado título pronto. Mantuvo jugadores importantes, y agregó a otros que, si se acoplan rápido, pueden darle un salto de jerarquía al equipo”, se lo comentó a este medio Andrés Imperiale, volante argentino, que se hizo un tiempo para dialogar con este medio.
Por otro lado, el mediocampista recordó sus inicios en el futbol: “Empecé a jugar a los cuatro años, en el club de mi barrio, que se llamaba La Consolata. En esa institución, pase toda mi infancia”. Además, subrayó su admiración por un histórico de Rosario Central. “De chico, admiraba al Kily González, porque era de mi barrio y es hincha de Central. Además, nuestros padres eran amigos y gracias a él, tuve la suerte de ir a La Bombonera, el día que Diego Maradona regresó a Boca, y pude ingresar al vestuario. Por otro lado, también destacaba al Negro Palma, Vitamina Sánchez y al Petaco Carbonari”.
  También, Andrés admitió como llegó a Rosario Central: “La chance de ir al Canalla surgió luego de que me seleccionaran a mí, juntos a otros chicos, para que vayamos a Central Sur, una especie de sucursal de Central, perteneciente a la zona Sur de Rosario”.
  Asimismo, Imperiale resaltó lo que significaba jugar en el estadio del Canalla: “La sensación de jugar en el Gigante de Arroyito fue única. Cuando era chico, mi único deseo era estar en dentro de esa cancha, y no estar en Europa o en un Mundial. Por suerte, con mucha esfuerzo, lo pude lograr”.
  “Me tocó debutar en Primera el 26 de agosto del 2005, cuatro días antes del famoso “Pirulazo”, donde Germán Rivarola, con un gran gol, Central eliminó a Newells, por la Copa Sudamericana. Quien hizo jugar mi primer partido en la “A”, fue Cufaro Russo, en un encuentro que jugaron varios juveniles, frente a Lanus, partido que ganamos 4-0. Un recuerdo inolvidable”, contestó el ex Central cuando se le consultó cuando debutó en Primera.
  Luego, sin tener muchas chances en Rosario Central, se marchó a Tucumán. “La oportunidad surgió luego de un llamado del entrenador de San Martin, que se encontraba en ese momento, diciendo que quería contar conmigo. Vitamina Sánchez, entrenador de aquel momento de Rosario Central, me dijo que había pedido a otro jugador en mi puesto,  y que, pese a que me iba a tener en cuenta, la tenía que pelear de atrás. Por eso, tome la decisión de irme. Al poco tiempo, me di cuenta que fue una decisión, ya que no tuve continuidad por diferentes motivos en el Ciruja, y tal vez, haberme quedado en el Canalla pude haber tenido más chances”, contó Andrés.
   Después, el rosarino jugó en Bolivia, para Oriento Petrolero y Blooming. “Bolivia es un lugar que tiene una particularidad geográfica demasiada importante a la hora de jugar al futbol: la altura. Como todos sabemos, en ese país, existe una gran desventaja a los equipos que viajan del llano a disputar encuentros a la altura. Recuerdo que se hacía muy difícil mantener el nivel. Por eso, a los equipos que son del llano, tienen la obligación de ganar de local, si quieren pelear por un titulo”, señaló.
   Posteriormente, el ex Rosario Central conoció Europa. “Haber jugado en Chipre fue una experiencia hermosa, ya que, me permitió conocer otra cultura, hablar otro idioma y vivir en una isla en el mar Mediterráneo bellísima, con playas increíbles. Desde lo futbolístico, fue un buen año y medio para mi, donde tal vez si me quedaba, hubiese tenido la oportunidad de jugar en algunos de los equipos conocidos de ahí, y competir en una competencia europea, porque me encontraba en muy buen nivel”, confesó.
  Por último, en la actualidad se encuentra en el equipo San José de Earthquakes
, EE.UU. En relación a su llegada a ese país, Imperiale sostuvo: “En diciembre del 2014, finalizó mi vinculo en Chile y tuve la posibilidad de quedarme jugando en Argentina, pero a último momento surgió la chance de ir a Costa Rica, para jugar en Deportivo Saprissa, el equipo más grande de Centroamérica. Mi único objetivo de ir a ese club era para venir a la MLS, porque tenía como objetivo estar en Estados Unidos. Por suerte, las cosas deportivos me salieron muy bien en Saprissa, y eso generó de sé que cumpliera mi deseo”.
Fotos: www.sjearthquakes.com. www.emol.com. La Nación.  



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